lunes, 16 de noviembre de 2009

¿Sabéis que el exceso de Café es símbolo de Inseguridad?


Pues si, no miento. Lo leí en el blog de "Enfeminino.com". Según dicen: "Un consumo excesivo de café revela la necesidad de estar constantemente estimulado para vencer la ansiedad y el miedo. En general, a los adictos al café les suele faltar confianza en si mismos y buscan dinamizar su propio Yo con la cafeína".

Lo siento mucho, pero yo soy nadie sin mis cafés... Por mucha inseguridad que revelen!





miércoles, 11 de noviembre de 2009

El Síndrome de Wendy



Lo padece más gente de la que nos imaginamos, y lo peor es que cada vez son más las mujeres que renuncian a su propia dignididad a cambio de sentirse "útiles".



Éstos son los síntomas ¿Tienes alguno?:




-Sentirse imprescindible


-Entender que el amor es sacrificio y resignación


- Evitar a toda costa que alguien se enfade


- Intentar continuamente hacer feliz a la pareja


-Insistir en hacer las cosas por la otra persona • Pedir perdón por todo aquello que no ha hecho o que no ha sabido hacer


-Necesidad imperiosa de cuidar del prójimo


- Convertirse en un progenitor o progenitora en la pareja.




Wendy es aquella mujer u hombre que se encuentra detrás de un Peter Pan. Y es que, como relata el psicólogo clínico Ángel Marín Tejero, “tras un Peter Pan siempre tiene que haber una persona, hombre o mujer, dependiendo del caso, que se encargue de hacer todo aquello que no hace él. Peter Pan no existe si no hay una Wendy que le aguante”. Pese a ello, el psicólogo Marín Tejero asegura que no se puede hablar del Síndrome de Wendy como una patología. “Hay trastornos de la personalidad que se podrían asemejar a este síndrome, pero como tal no es una patología clínica, lo que no quiere decir que con el tiempo no acabe produciendo desajustes y sufrimiento, tanto en la persona que lo sufre como en quienes le rodean”.



El Síndrome de Wendy se puede definir como el conjunto de conductas que realiza una persona por miedo al rechazo, por necesidad de sentirse aceptado y respaldado, y por temor a que nadie le quiera. En definitiva, por una necesidad imperiosa de seguridad. “Cuando el sujeto actúa como padre o madre en su pareja o con la gente más próxima, liberándoles de responsabilidades, podemos hablar de Wendy”, explica la psicóloga Pilar Arocas, quien añade que “estas conductas pueden darse tanto dentro del núcleo familiar, en los roles de padre-madre sobreprotectores, como en las relaciones interpersonales, con aquellas personas muy cercanas”.



La madre que despierta todos los días a su hijo para que no llegue tarde a clase, aquella que le hace los deberes, le resume las lecciones o subraya los apuntes, la esposa que asume todas las responsabilidades domésticas… es una Wendy en el núcleo familiar. Lo mismo ocurre en la relación de pareja si es ella o él quien toma todas las decisiones y asume las responsabilidades, actúa como madre o padre y como esposa-esposo o justifica la informalidad de su pareja ante los demás.






Chavas.com